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martes, 26 de julio de 2016

Lo inventaron ellas

Tomar el café que le despierta cada mañana, conectarse a internet sin necesidad de cables o incluso sobrevivir a disparos gracias a un chaleco, son acciones que serían imposibles de no haber existido las mujeres que contribuyeron a su invención.


En el escenario donde se representa la historia de la ciencia, poco espacio queda reservado para las mujeres. Las dificultades para acceder a la educación, los límites que coartaban sus derechos y el rechazo social hicieron invisibles las huellas que muchas mujeres dejaron al conocimiento científico.
Sin embargo, muchas consiguieron lo imposible pese a su tiempo, crear lo que no estaba inventado: la comunicación a distancia, el lavaplatos, la cafetera, o incluso el Monopoly.

WiFi

Hedy Lamarr derrumbó una vez más el mito de que las guapas son tontas. Esta judía austriaca, nacida en Viena, destacó desde pequeña por su inteligencia. A los 16 años empezó sus estudios de ingeniería, pero tres años después los abandonó atraída por su vena artística. Fue la primera actriz en protagonizar un desnudo y un orgasmo ante la cámara en Éxtasis (1933) y  quien desarrolló la primera versión de la teoría del espectro ensanchado, gracias al cual hoy podemos conectarnos a internet sin cables.
Sus padres arreglaron un matrimonio de conveniencia con un proveedor de municiones, aviones y sistemas de control del régimen nazi y fascista, que sometió a la joven a un estricto control. Hedy calificó esta época, en su novela autobiográfica, como un periodo de esclavitud.
Aprovechó esta época de soledad para continuar con los estudios de ingeniería y ceder al gobierno norteamericano información sobre los detalles de la tecnología armamentísitica que obtenía de los clientes de su marido.
En 1941 desarrolló, junto con el compositor George Antheil, un sistema de comunicaciones por radio que no podía ser interceptado por el enemigo, pues cambiaba constantemente de frecuencia. De esta forma crearon una versión temprana del espectro ensanchado, que se utiliza en diferentes sistemas de telecomunicaciones.
El Día del Inventor se celebra en su honor el 9 de noviembre, fecha de su cumpleaños.

Limpiaparabrisas

¿Alguien se imagina tener que bajar del coche para limpiar las lunas cuando llueve? La solución la inventó Mary Anderson. En 1903 recibe la patente, aunque no fue hasta 1913 cuando empezó a formar parte del equipamiento de los automóviles americanos. 
A esta mujer, nacida en Alabama, se le encendió la bombilla durante un viaje en tranvía a Nueva York, cuando observó las dificultades del conductor para mantener los cristales limpios. 
El invento inicial consistía en una nivela manipulada por el conductor que activaba un brazo mecánico con una lámina de goma.

Cafetera Melitta 

Lleva el nombre de su inventora, la alemana Melitta Bentz. La mujer nacida en Dresde, harta de tener que colar la bebida para eliminar los posos del café y de lavar las bolsas de lino que antes se utilizaban como filtros, descubrió que si hacía un agujero en un recipiente de latón y lo cubría con un papel obtenía un producto mucho más sabroso. 
El primer filtro lo fabricó a partir de un cuaderno de su hijo, recortando un redondel de papel, y lo colocó en el fondo del recipiente metálico. 
Tras verter el agua caliente obtuvo una bebida sin ningún trocito del café molido. A raíz de su descubrimiento, en 1908, desarrolló varios modelos hasta el modelo de filtro que se utiliza hoy.

Máquina lavaplatos

Aunque la idea fue patentada en 1850 por Joel Houghton, hubo que esperar más de tres décadas (1886) hasta que Josephine Cochrane diseñara la primera máquina capaz de lavar los platos sucios automáticamente. 
Esta señora de la alta sociedad tenía miedo de que el servicio rompiera alguna pieza de su valiosa vajilla china, por lo que decidió ponerse manos a la obra y crear un aparato que los limpiara solo. 
La señora Cochrane ganó el premio al mejor invento de la Feria Universal de Chicago en 1893 y tuvo un buen recibimiento por parte de restaurantes y hoteles.


Jeringa
La primera jeringa médica que podía utilizarse con una sola mano fue inventada por Letitia Geer en 1899, culminando los intentos que se iniciaron desde el siglo IX. Además, fue la primera jeringuilla que contenía partes de vidrio.

Pañal desechable
Hasta que la estadounidense Marion Donovan ingenió los pañales desechables, se utilizaban paños de tela que había que lavar y esterilizar constantemente, además de mojar la ropa y las sábanas de la cuna. 
En 1946 esta mujer, nacida en Indiana, ideó un pañal a partir de una cortina de ducha y de un relleno absorbente que no provocaba escozor a los bebés y que los protegía de la humedad. 
Durante las siguientes décadas desarrolló el modelo hasta hacerlo completamente desechable. 
Vendió la patente por dos millones de dólares.

Lenguaje de programación COBOL

Grace Hopper es conocida por ser quien enseñó a hablar a los ordenadores. 
Esta neoyorquina decidió alistarse en la Armada de los Estados Unidos en plena segunda guerra mundial y llegó a ser una pionera de las ciencias de la computación. 
En 1952 patentó el primer compilador, un programa que traduce las instrucciones con palabras en inglés al lenguaje de un ordenador. 
Además, trabajó como programadora en el Mark I, la primera computadora a gran escala de EE.UU y es considerada como la creadora de COBOL (Common Business Oriented Lenguage), el primer lenguaje universal de programación.

Conservas
La industria alimentaria sufrió una revolución en pleno siglo XIX tras el invento del enlatado al vacío de Amanda Theodosia Jones. 
La estadounidense consiguió eliminar el aire de los botes movida por el afán de conservar de mejor manera la fruta.

Típex
Un pintor nunca corrige sus errores borrando, sino que pinta encima de ellos. 
Es lo que pensó Bette Nesmith Graham, una mecanógrafa y artista comercial estadounidense que decidió verter un poco de pintura de agua en una botellita y llevárselo a su oficina junto a un pincel para corregir las erratas de la máquina de escribir. 
Así fue como, sin darse cuenta, inventó lo que hoy conocemos como típex, aunque ella lo bautizara en 1956 como Mistake Out –fuera errores, en español–. 
IBM rechazó comprarle su invento y lo comenzó a vender en casa con el nombre Liquid Paper.


Kevlar
Quién le iba a decir a Stephanie Kwolek que gracias a ella se evitarían miles de muertes. 
Esta mujer, que desde niña mostró un gran interés por la medicina y la ciencia, ingenió en 1964 un material finísimo pero cinco veces más resistente que el acero, el kevlar. 
A raíz de su invención, el material fue y sigue siendo utilizado en infinidad de objetos, desde chalecos antibalas y trajes de bomberos hasta velas de barcos y raquetas de tenis.


Proponen eliminar la identidad transgénero de las listas de trastornos mentales

  • La depresión, el sufrimiento y los problemas sociales que padecen los transexuales son causados, en su mayor parte, por el rechazo social y la violencia hacia estas personas, a  publicado The Lancet Psychiatry. 
  • La investigación apoya que para reducir el estigma es necesario eliminar la identidad transgénero de la clasificación de trastorno mental.


España / Ciberpasquinero

Un nuevo estudio de campo, dirigido por el Instituto Nacional de Psiquiatría Ramón de la Fuente Muñiz (México), muestra que la angustia y los problemas que sufren los transexuales son resultado del rechazo social y la violencia a la que son sometidos.
El estudio, publicado en The Lancet Psychiatry, es el primero realizado sobre el terreno (Ciudad de México) con el propósito de cambiar la catalogación de la identidad trans como trastorno mental. En la actualidad la investigación está siendo replicada en Brasil, Francia, India, Líbano y Sudáfrica.
La transexualidad está actualmente clasificada como un trastorno mental en los dos principales manuales de diagnóstico del mundo
Los investigadores entrevistaron a 250 personas transgénero entre 18 y 65 años de edad que estaban recibiendo servicios de atención médica en la clínica Condesa, la única pública especializada en servicios de asistencia sanitaria a transexuales en la Ciudad de México.
"El estigma que asocia trastornos mentales a la identidad transgénero ha contribuido a la precaria situación legal y a violaciones de los derechos humanos de las personas trans", comenta el autor principal, Geoffrey Reed, profesor en la Universidad Nacional Autónoma de México.
"La definición de la identidad trans como un trastorno mental ha sido utilizada para denegar la asistencia sanitaria y ha contribuido a la percepción de que las personas transgénero deben ser tratadas por especialistas en psiquiatría", explica Reed.  "La definición incluso ha sido mal utilizada por algunos gobiernos para negar a las personas trans el derecho a tomar decisiones sobre cuestiones como, por ejemplo, el cambio de documentos legales para la custodia de los niños", añade el profesor.

Rechazo social y violencia, los detonantes
El estudio refleja que los participantes tomaron conciencia de su identidad transgénero durante la infancia o la adolescencia –en edades comprendidas entre los 2 y los 17 años– y que fue durante ese periodo cuando mayor rechazo social experimentaron.
El 90% de los participantes sufrieron durante su adolescencia problemas familiares, sociales, en su vida académica o en el trabajo. El 83% experimentó trastornos psicológicos relacionados con su género, de entre los cuales los síntomas depresivos fueron los más comunes.
Más de tres cuartas partes de los participantes (76%) padecieron rechazo social por su condición sexual, en primer lugar por miembros de la familia, seguido por compañeros de trabajo y amigos. El 63% fue víctima de violencia –física y psicológica– relacionada con su identidad de género y, en casi la mitad de estos casos, la agresión fue perpetrada por un miembro de la familia.

El 90% de los participantes sufrieron durante su adolescencia problemas familiares, sociales o en el trabajo

Con modelos estadísticos, los investigadores concluyeron que el rechazo social y la violencia son los factores que más desencadenan la angustia y los problemas que sufren las personas transgénero.
"Las tasas de experiencias relacionadas con la exclusión y la violencia son extremadamente altas, lo que pone en relieve la necesidad de políticas y programas para reducir la estigmatización y la persecución de esta población", señala la investigadora principal, Rebeca Robles, del Instituto Nacional de Psiquiatría de México. "Los esfuerzos deben comenzar por la eliminación de la identidad transgénero de la clasificación de los trastornos mentales", añade la investigadora.

Modificar la clasificación

Ser transexual está actualmente clasificado como un trastorno mental en los dos principales manuales de diagnóstico del mundo: en la CIE-10 de la Organización Mundial de la Salud y en el DSM-5 de la Asociación Estadounidense de Psiquiatría.
Su catalogación como trastorno mental es cada vez más controvertida. Un grupo de trabajo de la OMS ha recomendado que la identidad transgénero se incluya en un nuevo capítulo del CIE-11 que hable sobre las condiciones relacionadas con la salud sexual.
"Nuestros hallazgos apoyan la idea de que la angustia que sufren es el resultado de la estigmatización", declara Robles. "El siguiente paso es confirmar esto en diferentes países y conseguir que la Organización Mundial de la Salud apruebe la modificación de la Clasificación Internacional de Enfermedades para el año 2018", concluye.

Referencia bibliográfica:
Rebeca Robles et al.: "Removing transgender identity from the classification of mental disorders: a Mexican field study for ICD-11". The Lancet Psychiatry, 26 de julio de 2016 http://dx.doi.org/10.1016/ S2215-0366(16)30165-1

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